
Hemos peinado la zona
mis dedos y yo
yo en persona y mis manos
y
ni rastro de tu reverencia
sin pruebas del azul de tus horas
los días no colaboran con el caso
solo se empeñan en borrar pistas
las huellas fiables de tu risa loca
Hemos descifrado cábalas
cientos de leves conjeturas
mis sentidos y yo
yo en persona y mi corazón
anotando premisa a premisa tu ausencia
rastreando palmo a palmo
cada centímetro de la oscura noche
el sigiloso cristal de tu ventana
el reflejo vivo de tu presencia
y
Solo hallamos amplios horizontes de cenizas
sin rastro